Señorío de Haro
El Señorío de Haro fue creado en 1093, con la donación de la villa de Haro en la Comunidad Autónoma de La Rioja (España) por parte de Alfonso VI de Castilla a Diego López I de Haro, señor de Vizcaya, quien incorporó el topónimo de la villa a su apellido. Muchos fueron los cambios de manos de este, recayendo en los reyes de Castilla o sus familiares, hasta la conversión en 1430 del señorío en el condado de Haro, entregado a Pedro Fernández II de Velasco.