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Claudio Galeno Nicon de Pérgamo, en griego antiguo, Γαληνός, Galēnos (Pérgamo, 129-Roma, c. 201/216), más conocido como Galeno, fue un médico, cirujano y filósofo griego en el Imperio romano.[1][2][3] Considerado uno de los más completos investigadores médicos de la Edad Antigua, sus puntos de vista dominaron la medicina europea a lo largo de más de mil años en campos como la anatomía,[4] la fisiología, la patología, la farmacología,[5] y la neurología, así como la filosofía[6] y la lógica.
Galeno se formó bajo influencia griega y al amparo de uno de los mayores templos dedicados a Esculapio (Asclepios). Estudió medicina con dos seguidores de Hipócrates: Estraconio y Sátiro, y aún después visitó las escuelas de medicina de Esmirna, Corinto y Alejandría. Finalmente viajó a Roma donde su fama como médico de gladiadores le llevó a ser elegido médico del emperador Marco Aurelio.
En la Edad Media, los escritos de anatomía de Galeno se convirtieron en el pilar de los estudios universitarios de los médicos medievales, pero debido a la caída del Imperio romano de Occidente en el siglo V estos acusaron un evidente estancamiento intelectual. Sin embargo, en el Imperio bizantino y en el califato abasí se continuaron estudiando y aportando avances. Algunas de las ideas de Galeno eran incorrectas, pues nunca diseccionó un cuerpo humano debido a los tabúes sobre esta práctica en la sociedad grecorromana. Pese a esto, también realizó aportaciones notables: corrigió el error de Erasístrato, quien creía que las arterias llevaban aire, y es considerado uno de los primeros experimentalistas de la medicina.[7] En el medievo los profesores y estudiantes de medicina de Bolonia comenzaron a diseccionar cuerpos; Mondino de Luzzi (c. 1275-1326) redactó el primer libro conocido de anatomía basado en disecciones humanas.[8][9]
Se le dio el nombre de Claudio en la Edad Media, pero esto parece ser un error historiográfico que se subsanó en la Edad Moderna, cuando sus textos ganaron una renovada aceptación. En la década de 1530, el anatomista y médico de Bruselas Andrés Vesalio comenzó a traducir del griego al latín muchos de los textos de Galeno y su influyente publicación de anatomía, De humani corporis fabrica (1543) estuvo profundamente influida por la obra del médico grecorromano.[10]