En esta página puede obtener un análisis detallado de una palabra o frase, producido utilizando la mejor tecnología de inteligencia artificial hasta la fecha:
Un Fondo cotizado en bolsa (abreviado como FCB) (del inglés: exchange-traded fund, ETF por sus siglas en inglés), o Fondo de inversión cotizado, es un fondo de inversión cuya principal característica es que se negocia en mercados de valores secundarios. La comercialización de estos productos supone un desafío desde dentro del mercado financiero a su propia ineficiencia, pues se trata de un producto óptimo en cuanto a asignación de activos (por su elevado grado de diversificación), simplicidad a la hora de operar (igual de ágil que las acciones) y costes (es más barato que los fondos de inversión).[1]
La mayoría de los Fondos cotizados en Bolsa (FCB) combinan las características de las sociedades de inversión abiertas –open-end mutual funds- y de las acciones –stocks-. Tal como una sociedad de inversión indexada, los FCB o ETF representan la propiedad proporcional sobre una cartera de inversiones subyacente de valores que replican un índice de un mercado específico. A diferencia de las sociedades de inversión, los inversionistas individuales no compran o redimen las acciones del fondo, en su lugar, compran y venden acciones del ETF como acciones en un mercado o bolsa determinada, incluyendo The American Stock Exchange, The New York Stock Exchange, NYSE™, y The Chicago Board Options Exchange.
El principio es sencillo: no se compran acciones individuales sino el valor de los índices. Por ejemplo, si se compra un ETF que replica el índice bursátil DAX alemán, se invierte en realidad en las 30 empresas incluidas en ese índice. Desde ese momento, el valor del ETF va asociado al del índice: si el conjunto del DAX sube, también el ETF gana valor; si el DAX cae, también el ETF pierde valor. Ya nadie decide cuántas acciones conviene comprar. El ETF se guía automáticamente por el índice, es decir, por todas las acciones que este incluye.
La dinámica de comercialización es una mezcla de dos factores: los precios de los ETF fluctúan de acuerdo a los cambios en sus carteras subyacentes y también de acuerdo al cambio en la oferta y la demanda de las acciones de los ETF. Los ETF ofrecen al inversionista una oportunidad rentable para comprar o vender una participación en una cartera de bonos o acciones en una simple transacción.