El
gladius era la
espada corta utilizada por los
legionarios
romanos. Diseñada para perforar, la hoja recta y ancha, de doble filo, tenía unos 60
centímetros de largo. Se conocen cuatro estilos diferentes de
gladius, llamados
gladius de Mainz,
gladius de Fulham,
gladius de Pompeya y
gladius hispaniensis, de acuerdo a la procedencia de la primer pieza registrada. Se estima que el
gladius se diseñó a partir de las espadas cortas empleadas por los
mercenarios celtíberos al servicio de
Aníbal durante las
Guerras Púnicas.