En esta página puede obtener un análisis detallado de una palabra o frase, producido utilizando la mejor tecnología de inteligencia artificial hasta la fecha:
Un insecticida es un compuesto químico utilizado para matar insectos.[1] El origen etimológico de la palabra insecticida deriva del latín y significa literalmente matar insectos. Es un tipo de biocida.
Los insecticidas tienen importancia para el control de plagas de insectos en la agricultura o para eliminar todos aquellos que afectan la salud humana y animal. Se afirma que los insecticidas son un factor importante detrás del aumento de la productividad agrícola del siglo XX.[2] Casi todos los insecticidas tienen el potencial de alterar significativamente los ecosistemas; muchos son tóxicos para humanos y/o animales; algunos se concentran a medida que se esparcen a lo largo de la cadena alimentaria.
Los ácaros son artrópodos y pueden ser inmunes a algunos insecticidas (se eliminan con productos específico, los acaricidas). Los insecticidas pueden ser repelentes o no repelentes. Los insectos sociales como las hormigas no pueden detectar los no repelentes y se arrastran fácilmente a través de ellos. Cuando regresan al nido, se llevan insecticida y se lo transfieren a sus compañeros de nido. Con el tiempo, esto elimina a todas las hormigas, incluida la reina. Esto es más lento que algunos otros métodos, pero por lo general erradica por completo la colonia de hormigas.[3]
En el lenguaje cotidiano este término se utiliza para referirse a los productos que tienen la propiedad de matar insectos y de una forma restringida a las suspensiones en botes de aerosol, o como una crema para aplicación.