Un
elemento químico tiene uno o varios
isótopos, de los cuales todos, algunos, o ninguno, pueden ser
isótopos estables. Los isótopos que no son estables, a diferencia de los estables, se desintegran para dar lugar a otros
núclidos emitiendo partículas o radiación electromagnética.
Por ejemplo, el tecnecio no tiene ningún isótopo estable mientras que el estaño tiene diez isótopos estables.
Se conocen unos 2500 núclidos, de los cuales son estables menos de 300. La representación del número de neutrones (N) frente al número de protones (número atómico, Z) indicándose los isótopos estables se denomina carta de Segrè (diseñada por el físico Emilio Segrè).