Los
Plebiscitos (del
latín Pebli scita) fueron inicialmente decisiones tomadas por la
plebe, que adquirieron mayor relieve progresivamente. El 465 adC el
dictador Quinto Hortensio hizo votar por los
Comicios Centuriados la ley que obligaba a todos los ciudadanos a acatar los
plebiscitos. Aunque no se precisaba el asentimiento del
Senado, fue generalmente solicitado.