"Alambique" es un sustantivo masculino.
/enˈlam͡bi.ke/
El término "alambique" hace referencia a un dispositivo utilizado para la destilación de líquidos. Consiste en un sistema en el que se calienta una mezcla, normalmente un líquido fermentado, para separar sus componentes volátiles mediante el proceso de evaporación y posterior condensación. Se utiliza comúnmente en la producción de bebidas alcohólicas y en algunas aplicaciones químicas.
En el idioma español, la palabra "alambique" es utilizada tanto en el habla oral como en contextos escritos, con un uso moderado en ambos.
Traducción: The still in the workshop produces a liquor of excellent quality.
Ejemplo: Aprendimos a utilizar un alambique para destilar el vino.
Aunque "alambique" no es común en expresiones idiomáticas, hay algunas frases relacionadas que podrían usarse en contextos referidos a la destilación o la elaboración de bebidas:
Significado: Refinar y aclarar las ideas de manera meticulosa.
Expresión: Hacer un alambique de los recuerdos.
Significado: Procesar y recordar los momentos pasados de forma nítida.
Expresión: Sacar el sabor de la vida como el alambique saca el licor.
La palabra "alambique" proviene del árabe andalusí "al-‘anbīq", que a su vez se deriva del árabe clásico "النبيذ" (an-nabīdh), refiriéndose al arte de destilar. Esta etimología resalta la rica tradición de destilación que se desarrolló en la península ibérica.
El término "alambique" es fundamental en el contexto de la destilación y la producción de bebidas alcohólicas. Su uso perdura tanto en la lengua hablada como en la escrita, y aunque no es parte de expresiones idiomáticas comunes, puede ser utilizado de manera creativa para transmitir conceptos relacionados con la destilación y la elaboración de recuerdos e ideas.