"Masada" es un sustantivo propio. Se refiere principalmente a una antigua fortaleza ubicada en Israel.
/mɑˈsaðɑ/
Masada es el nombre de una antigua fortaleza en el desierto de Judea, famosa por su historia en el contexto de la resistencia judía contra el Imperio Romano. En el ámbito del idioma español, se utiliza principalmente en contextos históricos y culturales, especialmente relacionados con la historia judía y el siglo I d.C.
La frecuencia de uso de "Masada" es relativamente baja en el habla cotidiana, pero puede encontrarse en contextos escritos más formales, como libros de historia, artículos académicos y documentales.
"Masada es un símbolo de la resistencia judía."
Masada is a symbol of Jewish resistance.
"La fortaleza de Masada se levanta sobre el Mar Muerto."
The fortress of Masada rises above the Dead Sea.
"Muchos turistas visitan Masada cada año."
Many tourists visit Masada every year.
Aunque "Masada" no se usa comúnmente en expresiones idiomáticas en español, a continuación se presentan algunas frases que reflejan su significado cultural e histórico:
"Luchar como en Masada."
Esta expresión se usa para referirse a una lucha feroz y valiente, similar a la resistencia de los defensores de Masada.
"To fight like in Masada."
"No caer en la misma trampa que Masada."
Se usa para advertir a alguien sobre los peligros de rendirse.
"Do not fall into the same trap as Masada."
"Masada no solo es un lugar, es un espíritu."
Para enfatizar que el lugar tiene un significado que va más allá de su geografía.
"Masada is not just a place, it is a spirit."
El término "Masada" proviene del hebreo "מַצָּבָה" (matzavah), que significa "fortaleza". Esta fortaleza fue construida por el rey Herodes el Grande entre 37 y 31 a.C. y ha sido un lugar de importancia histórica y cultural desde entonces.
Si bien "Masada" es un nombre propio y no tiene sinónimos o antónimos directos en su uso, se le podría asociar con términos relacionados con la fortaleza, como "fuerte" o "ciudadela". En contextos históricos, se podría considerar como antónimo del "exilio" debido a su simbolismo de resistencia y permanencia.