La iglesia de San Isidro del Camí Vell de Torrente fue edificada en el año 1902 "damunt d'un camp de fabes" (sobre un campo de habas), siendo obra del prestigioso arquitecto de entre siglos Joaquín María Arnau Miramón, quién la diseñó por encargo del arzipreste de Torrente, Salvador Muñoz Álvarez, que hijo de la huerta de la partida del Zafranar en la vega de Valencia, regaló los terrenos y sufragó el coste de la obra.

Salvador Muñoz, como donante, únicamente impuso una condición, que se levantase la iglesia dedicándola a San Isidro Labrador, en honor de su padre Isidro Muñoz, lo que propiciará a la larga la nomenclatura de la zona. Desde ese momento actuará como ermita dependiente de la Parroquia de San Nicolás de Bari de Patraix, actual del Sagrado Corazón, y en 1954 se elevará a parroquia de San Isidro Labrador, siendo su primer párroco el ecónomo Antonio Tomás Ribes.

En 1960 amplía su denominación y pasa a llamarse Parroquia de Ntra. Sra. de los Desamparados y San Isidro Labrador. Desde 1982 a 2009 el párroco fue Sebastián Cerezuela Pérez CMF; desde el 24 de octubre de ese mismo año hasta el 5 de octubre de 2014, Ramón Rodríguez Guerrero y desde la citada fecha, Juan León Herrero Pérez.