Supermodelo es aquella persona que trabaja de modelo con muy alta remuneración y que goza de fama mundial. El término fue popularizado en la cultura popular en la década de 1990. Según Albert Watson, uno de los fotógrafos de la época, todo fue fruto de la propia competencia entre agencias, las cuales empezaban a exigir que se incluyera en las portadas el nombre de cada modelo.^[3]​

Trabajan, por lo general, para destacados diseñadores de moda y marcas de elevado prestigio. Tienen contratos, patrocinadores y campañas publicitarias millonarias, llegando a convertirse en celebridades.^[4]​^[5]​^[6]​

Les distingue del resto de modelos principalmente su fama mundial, acaparando un gran porcentaje de las portadas de las principales revistas de moda. Aunque el resto de modelos puedan gozar de gran belleza, las o los supermodelos utilizan su mayor popularidad para conseguir mejores contratos. Del mismo modo, las marcas de lujo contratan a supermodelos para asociar su fama a los productos que promocionan. En la década de los 80 y los 90 sobre todo, algunos supermodelos o top model masculinos emergieron, adquiriendo también un protagonismo importante en la industria de la moda.^[7]​